Las tejas de asfalto son uno de los materiales más comunes y utilizados en la construcción de techos en la actualidad. Sin embargo, pocos conocen su historia y la evolución que han tenido a lo largo del tiempo.
Las tejas de asfalto tienen su origen en la antigua Grecia, donde se utilizaban tejas de barro para cubrir los techos de las casas. Con el paso de los años, este material fue evolucionando y en la Edad Media, se comenzaron a utilizar tejas de madera y paja.
Fue en el siglo XIX cuando se comenzaron a fabricar las primeras tejas de asfalto en Estados Unidos. Estas tejas estaban compuestas por asfalto, fibra de vidrio y minerales, lo que les otorgaba una mayor resistencia y durabilidad. Con el tiempo, se fueron perfeccionando y actualmente se fabrican en una amplia gama de colores y estilos, lo que las hace una opción muy versátil y estética para cubrir los techos de las viviendas.
Las tejas de asfalto se destacan por su fácil instalación, su resistencia a las inclemencias del tiempo y su bajo mantenimiento. Además, son más económicas que otros materiales como la cerámica o el metal, lo que las convierte en una opción muy popular entre los constructores y propietarios de viviendas.
En la actualidad, las tejas de asfalto se han convertido en uno de los materiales más utilizados en la construcción de techos en todo el mundo. Su durabilidad, resistencia y versatilidad las hacen una opción ideal para cualquier tipo de proyecto de construcción.
En resumen, la historia de las tejas de asfalto es larga y llena de evolución. Desde sus humildes comienzos en la antigua Grecia hasta su actual popularidad en la construcción moderna, las tejas de asfalto han demostrado ser un material confiable y duradero para cubrir los techos de las viviendas.